Una sucursal bancaria de la localidad coruñesa de Bertamiráns sufrió ayer un extraño atraco. El ladrón, a cara descubierta y en principio sin esgrimir ningún tipo de arma, se hizo con un pequeño botín. La Guardia Civil y la Policía Local de Ames han iniciado una investigación para localizarle.

El hombre, de unos 40 años con gorra y perilla, atracó una oficina del BBVA hacia las 10.00 horas. El varón se dirigió al mostrador y amenazó a una de las empleadas, sin que conste si utilizó algún tipo de arma, llegando a consumar el atraco en unos minutos.

El botín que se llevó era "escaso" y no alcanzaría los 3.000 euros. Tampoco se registraron heridos ni altercados, a pesar de que en la oficina había varios clientes. La investigación corre a cargo de la Guardia Civil de Bertamiráns que ha desplegado un dispositivo de búsqueda para localizar al atracador.