“El festival que nació del deseo de un aficionado a la música heavy de llevar a su localidad a tocar a su grupo favorito es hoy en día el festival de rock duro más importante de España y uno de los más importantes de Europa”. El periodista gallego David Saavedra –autor de “Festivales de España” (Anaya Touring)– resume así lo que supone el Resurrection Fest. Desde el próximo miércoles, abrirá sus puertas hasta el domingo: será la mayor edición de su historia y se espera la asistencia de 140.000 personas.

“Será la edición con más público”, confirma David Méndez, codirector del festival quien asegura a FARO que “estamos muy ilusionados”. No es para menos. Desde hace tres años, los fans del Resu no viven una edición normalizada. Hay que recordar que la del año pasado fue en pequeño formato y con público sentado.

Reconoce que “es una edición diferente” ya que por primera vez se desarrollará en cinco días. “Con este aumento del domingo queríamos premiar a la gente que tenía entradas desde 2019 porque los billetes se vendieron en octubre-noviembre de ese año. Desde entonces, llevamos el sold-out (entradas agotadas)”, explica.

Añade que “la fiesta presentación del miércoles este año es casi como un día más del festival, con cabeza de cartel incluido”. Recordemos que las bandas estrella son Deftones y Bullet for my Valentine.

El jueves, los cabeza de cartel son Judas Priest; mientras que el viernes reinará Sabaton; el sábado, Avenged Sevenfold; y el domingo Korn y Bring me the Horizon.

Respecto a las peticiones especiales de los grupos, David Méndez asegura que en esta edición, de momento, no les ha llegado nada que les llame la atención. En cuanto a bandas de ediciones anteriores, recuerda que siempre son “cosas normales” como una mariscada para los Kiss. La excepción la marcaron años atrás Slayer. “Pidieron que el backstage, que era blanco, fuese totalmente negro”, recuerda.

En cuanto a si en esta edición, el Resu se suma a la moda de festivales que establecen derechos restrictivos con los asistentes que no presentan entrada VIP, David Méndez explica que esta solo permite el acceso a la zona Pandemonium, que presenta un área de comida y una barra. “Este año el Pandemonium es más grande que en la edición de 2019”, añade.

Para quienes quieran ‘madrugar’ para lograr las primeras filas, la hora de apertura del festival serán las dos de la tarde.

David reconoce que han vivido años de “mucha incertidumbre” con la pandemia. “Hemos estado trabajando para algo que no sabíamos si se iba a celebrar. Ahora ya estamos cerrando actuaciones para el año que viene”, explica.

Respecto a contar con System of a Down (el cabeza de cartel global que iba a acudir en la pasada edición y que finalmente se cayó por la pandemia), Méndez confirma que “nuestra idea es traerlos cuando vuelvan a estar de gira. Con esto, no quiero decir que vaya a ser en 2023. Es una banda complicada porque no viene a Europa muchas veces. Nos quedó esa espina clavada”.

En cuanto a temas de seguridad, indica que “la media de percances en el Resu es muy baja en comparación con otros festivales”. Respecto a la banda que robaba móviles en la edición de 2019, señala que fue arrestada por la policía y que este lunes tendrán una reunión para ultimar y mejorar la seguridad.