Una vez al año, por lo menos, en la comisaría provincial de Policía se lleva a cabo un simulacro de emergencias, para conocer las pautas de reacción básicas en caso de tener que responder a un imprevisto. Especialistas en prevención de riesgos laborales y en primeros auxilios recordaron a los participantes las nociones básicas sobre cuestiones como la reanimación cardiopulmonar o la organización de una evacuación, en caso de un incendio en las instalaciones.
En la sesión de entrenamiento se simuló la existencia de un fuego en la cuarta planta del edificio policial. En concreto, un incendio en el interior del vestuario masculino. El objetivo de la jornada era comprobar el funcionamiento de los medios materiales y de los recursos humanos previstos para responder a este tipo de situaciones, así como cuantificar los tiempos empleados para la operación de respuesta y valorar la respuesta y la participación de los asistentes.
Durante el ejercicio se utilizó humo, con el fin de poner a los participantes en un escenario lo más parecido posible a una emergencia real. Se llevó a cabo una evacuación parcial hacia el punto de encuentro estipulado en el plan de medidas de emergencia de la comisaría de la Policía Nacional en Ourense.