El calor de ayer recordaba en la Moaña Antiqua, en San Martiño, las justas de la vieja Castilla, la del Cid, la de Antonio Machado. Y ayer en esta fiesta medieval de San Martiño era día de justas a caballo, en la que participaban los miembros de la Asociación ADOC de Cabaleiros de Moaña, armados para la ocasión. El sudor mojaba su elegantes ropas y el sol hacía la justa más terrorífica. Bien interpretada por los Cabaleiros de Moaña, esta modalidad de lucha medieval tiene gran aceptación en esta feria, en la que ayer apretaba el calor y las ropas antiguas no ayudaban a hacerlo soportable. Pero daba igual. Que era día de fiesta y de jarana, de verano que se levanta, de turistas que no se acuestan.
Precisamente el fuerte calor obligó a que la exhibición de cetrería se retrasara. Estaba prevista para las 19.30 horas y los halcones alzaron el vuelo cuando la brisa del mar refrescaba el ambiente. Tanto las justas como la cetrería son actividades que logran congregar gran cantidad de público a su alrededor.
Cuando la tarde languidecía Manuel Uxío presentaba su libro “Igrexa de San Martiño de Moaña, arte e historia”. El acto tuvo lugar en el propio templo. Mucho más tarde, a las 22.30 bien pasadas comenzó el concierto a cargo de Anxo Lorenzo Banda y mucho después una “foliada” popular que se festejaba con buen ánimo y agua de fuego en el atrio de la iglesia de San Martiño. Hoy se clausura feria con más cetrería, actuación de Charaviscas, teatro del Dúo Vaguedades y gaiteiros.