Ochenta y tres días de media tiene que esperar un gallego para ser operado, un día más que hace un año. Así lo revelan los datos que se hicieron públicos ayer correspondientes al 31 de marzo de 2013. En el caso de las patologías catalogadas como Prioridad 1 (muy graves) el Sergas tarda ahora casi cuatro días más en llevar al paciente al quirófano. Aún así, los atiende en 18,7 días, dentro del objetivo de 30 días que se había fijado la Xunta para estos casos. Pese a que la espera es mayor, son menos las personas que aguardan por una intervención quirúrgica -37.665 frente a 39.614-. Pero el mejor balance que presenta la Consellería de Sanidade es en consultas. No solo hay 21.000 pacientes menos pendientes de una cita con el médico sino que esperan una semana menos que hace un año: un total de 49,3 días.

Es la demora más baja desde que se tienen registros (2006). En solo un año se redujo además un 12 por ciento el número de pacientes pendientes de una cita con el especialista, una cifra que ahora queda reducida a 149.682. La explicación de esta drástica bajada para la Consellería de Sanidade es simplemente "una buena gestión".

Sin embargo, esta gestión no ha dado los mismos resultados para reducir la la lista de espera quirúrgica.Si se tiene en cuenta el dato global de la red de hospitales que trabajan para el Sergas la demora se incrementó solo un día, pero Sanidade desglosa cual sería la tardanza media sin incluir Povisa, el centro más saturado, y, en ese caso, el balance es incluso peor puesto que aumenta en cinco días la espera para operarse, pasando de 64,2 a 69,3. La razón es que el hospital vigués ha conseguido meter en quirófano a sus pacientes nueve días antes que hace un año.

En todo caso, desde Sanidade siempre se ha insistido que más importante que reducir la lista de espera global era priorizar a los pacientes para que se atendiese primero a aquellos más graves.Y está cumpliendo su objetivo de atender en menos de 30 días los casos más urgentes, aunque el tiempo medio de espera pasó de 14,9 días a 18,7 en solo un año.

Donde no cumple es con los casos de Prioridad 2 (enfermos graves). Se había comprometido a operarlos antes de 60 días y se está alejando de esta meta puesto que en marzo de 2013 la demora creció en más de seis días para estos pacientes pasando de 62,7 días a 68,9.

La espera para operarse subió en diez hospitales: A Coruña (11 días), el Marcide Novoa Santos (9 días), el Hospital de Monforte (7), el Hospital de Vigo (7), Valdeorras (2), Santiago, (1,6) Xunqueira (0,2), Hospital da Costa (0,2) y Ourense (0,1).

Por el contrario, bajó en el Hospital do Barbanza (12 días), Povisa, en Pontevedra (1,8), Xeral Calde de Lugo (0,5), y Verín (0,3).

Los hospitales donde más se tarda en operar a los pacientes, después de Povisa (176 días), son el Hospital de A Coruña (88,6 días) y, en segundo lugar, el de Vigo (87,1).

En cuanto a las consultas médicas, donde se ha conseguido reducir en 21.000 los gallegos que están en espera, más de la mitad de estos pacientes corresponden al descenso registrado en el Complejo Hospitalario de Vigo, donde en solo un año disminuyó la cola para ir al especialista en 13.900 personas. Aún así, sigue estando a la cabeza de Galicia con el mayor tiempo de demora (67,6 días) y el mayor número de pacientes (37.704). Por el contrario, Pontevedra es donde menos se espera para ir al médico (23,8 días).