A comienzos del presente mandato, el grupo de gobierno adecuó los patios exteriores del antiguo colegio público Manuel Rivero como espacio de aparcamiento. Las más de una veintena de plazas fueron utilizadas durante meses por muchos vecinos, pero recientemente el Concello anunció que este espacio quedaba invalidado de nuevo como estacionamiento público. ¿Por qué? El gobierno municipal entendió que con la reapertura del parking Aldea Grande no era necesario preservar esta zona que, por otro lado, dista escasos metros del aparcamiento. Y de paso, tampoco se negó, fomentar el hábito de uso de la nueva infraestructura pública. Para clausurar el área del Rivero se colocó una malla y una señal de prohibición de acceso, pero esta cadena metálica es retirada con frecuencia por particulares que, sobre todo por las noches, cuando hay menos vigilancia, estacionar sus vehículos. La malla tiene un mecanismo que hace fácil su retirada.