El Domaio aguantó ayer bien ante uno de los conjuntos punteros de la categoría, el Marcón Atlético. Los moañeses supieron igualar la calidad de sus rivales y estuvieron cerca de sumar, pero finalmente se llevaron un sabor agridulce del campo de A Granxa al perder por la mínima con un gol de José Carlos Sanmartín desde el punto de penalti.
El duelo no estuvo exento de polémicas arbitrales, tanto por su decisión desde los 11 metros como por la expulsión de Iker en el tramo final.
Con esta derrota el Domaio se sitúa en el puesto 11º de la clasificación y mantiene los 10 puntos en su casillero. La igualdad es tal que dos victorias le permitirían llegar a los puestos que pelean el ascenso.