El Coruxo presentó ayer en O Vao a Rubén Sánchez, el refuerzo invernal destinado a ayudar a que el equipo dirigido por Josiño Abalde logre la permanencia en Segunda División B. Sánchez juega en la delantera, la demarcación más frágil a causa de las lesiones y de la rescisión de contrato del díscolo Edin Cakovic.

Rubén Sánchez Montero, de 24 años y 1,92 de altura, ha firmado con el Coruxo hasta el final de la presente temporada. Llega del Almansa (Tercera División). En su trayectoria deportiva ha pasado por el Coslada juvenil (05-06), Las Rozas juvenil (06), Vicálvaro (06-07), Bellinzona (07), San Fernando Henares (07-08), Vicálvaro (08), Sportivo Luqueño (08-09, Levante B (09), Levante (09), Ontinyent (09-10), Gandía (10-11), Villanovense y Almansa.

El madrileño afronta con ilusión el reto que la escuadra viguesa le plantea. "Es un paso adelante muy importante en mi carrera. La Segunda División B es una categoría muy interesante", confirma el jugador, que se reencuentra en la plantilla con Yago, al que conoce de su etapa en el Levante. "Hablé con Yago Yao y me dio buenas referencias del Coruxo. Eso me ha puesto las cosas muy fáciles para venir. Quiero aportar goles y movilidad en ataque. Tengo una gran ilusión por hacer las cosas bien". Matiza sobre su estilo que es un delantero que ha dado muchas asistencias. "Eso me gusta", reafirma.

Las primeras impresiones que ha extraído Rubén Sánchez de su nuevo hogar son excelentes: "Ya me entrené con el grupo varias veces y me he encontrado un equipo muy unido y con las ideas muy claras". Está perfectamente informado de la situación del equipo: "El Coruxo no ha perdido ningún partido en su casa esta temporada y es un dato muy importante"

Sánchez está dispuesto a debutar de forma inmediata, este fin de semana: "Jugar en Albacete es una decisión del entrenador. Yo estoy preparado y dispuesto. Tengo ritmo de competición".