La tragedia golpeó en la mañana de ayer en forma de accidente mortal en el ámbito laboral. Sucedió en una empresa de tratamiento de madera en las inmediaciones del polígono industrial de Tremoedo, concretamente en la carretera de Deiro, poco después de las ocho de la mañana.
La víctima, de 36 años y natural de Tomiño, se encontraba manipulando la máquina en ese momento cuando quedó atrapado por el mecanismo que se encontraba en los exteriores de la nave principal del aserradero Altman.
Fueron los propios compañeros, entre ellos un familiar, los que le auxiliaron en un principio, pero nada pudieron hacer por salvarle la vida. Solo pudieron liberar el cuerpo de la máquina de cortar madera en la que había quedado atrapado con consecuencias mortales. La llegada de los servicios médicos solo sirvió para constatar el fallecimiento.
En el operativo participó Urgencias Sanitarias de Galicia-061, los bomberos de Ribadumia, la Guardia Civil, la Policía Local y Protección Civil. Tal y como es norma en estos casos, se ha abierto investigación aunque las evidencias no invitan a pensar en nada que no sea la consecuencia mortal de un accidente laboral. Lo que queda por esclarecer es si en el momento que la víctima quedó atrapado por la máquina vino precedido de algún desvanecimiento.
Todo lo relativo a las medidas de seguridad en escenarios laborales de riesgo vuelve a ponerse de manifiesto debido a lo sucedido en la empresa maderera vilanovesa. Lo sucedido ayer responde a la categoría de sucesos en el centro de trabajo, una cifra que en 2023 alcanzó en todo el país a 721 trabajadores.
En el caso de lo sucedido en Vilanova, el fallecido se había desplazado hasta la empresa Altman como trabajador de la empresa forestal de Tomiño para la que trabajaba para realizar allí una tarea de tratamiento de la madera en la máquina astilladora.