La huelga del metal en la provincia de Pontevedra va para largo. La imposibilidad de un acuerdo por las posiciones tan alejadas de la patronal y los sindicatos ha llevado a convocar cuatro jornadas más de movilizaciones que tendrán lugar los días 6, 7, 12 y 13 de julio. Estas jornadas se sumarán a la de ayer, donde los piquetes se movilizaron desde las cuatro de la mañana, logrando paralizar la actividad en puntos estratégicos como Valga, una de las zonas más industrializadas de la comarca. En Vilagarcía, poco antes del inicio de la manifestación, los piquetes provocaron un enorme atasco en el acceso al municipio desde el norte al quemar varios neumáticos en la calle de Rosalía de Castro, incendio que tuvo que ser extinguido por los bomberos.
La manifestación transcurrió sin incidentes, más allá de los petardos y las tracas de pólvora utilizados por los participantes para hacer visible la protesta que realizan. La movilización finalizó en la plaza de Galicia, donde se leyó un manifiesto en el que se desgranaron las reclamaciones que realizan desde el sector que son, fundamentalmente, igualar los salarios al IPC, pagar los atrasos, reducción de jornada en 24 horas anuales y subrogación de los trabajadores para favorecer la estabilidad laboral y evitar la competencia desleal.
Las tres centrales sindicales recomiendan a la patronal del sector reconsiderar su postura y sentarse a negociar “una mejora efectiva de las condiciones laborales, ya que, de lo contrario llegaremos hasta donde sea necesario para garantizar los derechos de los trabajadores”.