La reclamación al Concello de una indemnización de 29 millones por parte de la promotora de Valery Karpin al “incumplir” el convenio del solar de Cluny recibió ayer una dura respuesta del alcalde, que acusó al ex futbolista de “buscar dar un pelotazo”. Abel Caballero no se anduvo por las ramas y afirmó que estas prácticas “se acabaron en Vigo, sea quien sea el que lo intente”, mientras él presida la Corporación. El uso de la parcela se mantendrá como educativo o, en todo caso, dotacional para algún equipamiento público, y ya descartó de antemano que se vayan a construir en la parcela del antiguo colegio de Gran Vía viviendas privadas.
El convenio firmado por el ex alcalde Manuel Pérez con la Congregación de Religiosas San José de Cluny en 1998 carece, según el alcalde, de validez legal. El ex regidor no tendría competencias para firmar el acuerdo, apuntó, y sostiene que los servicios jurídicos lo acreditan. “Al Ayuntamiento lo comprometen en el planeamiento urbanístico las decisiones del pleno de la Corporación y el Plan Xeral, y esa decisión nunca se dio”.
El documento establecía el traslado del centro educativo a la Carretera Provincial a cambio de conceder en la parcela de Gran Vía una edificabilidad residencial y terciaria (comercial y oficinas) de 11.800 metros cuadrados y habilitar 550 de suelo dotacional. La empresa Inversiones Canayma compró la propiedad a las religiosas en 1999, y Karpin adquirió la sociedad en 2006. El Plan Xeral publicado el 25 de agosto pasado excluye el convenio, y el ex futbolista y empresario reclama al Concello 29 millones por incumplimiento.
Caballero sugirió ayer, en referencia explícita a la reclamación de 29 millones, que “quienes busquen pelotazos deben ir a otra parte”. Su postura sobre la cuestión es, recalcó, inamovible. El uso que le dará el Ayuntamiento a Cluny está “sin decidir”, pero se mantendrá como educativa o se destinará a otro servicio público. “Cluny no dejará de ser dotacional en tanto yo sea alcalde”, aseguró.
La parcela entra en el área que regulará el Plan Especial del Ensanche, ahora en fase de elaboración. Éste determinará si el antiguo colegio se protegerá por su valor patrimonial y, por tanto, si debe ser conservado. Aunque no fuese así, Caballero mantiene que el uso de la parcela no variará.
Críticas al PP
No sólo cargó contra la reclamación de Karpin el ex regidor, sino que también aludió a un posible apoyo del Partido Popular a la demanda del ex futbolista. “Si algún otro grupo político que votó en un sentido tiene otra pretensión [a la de conservar el uso educativo], que sepa que mantengo un absoluto rechazo, tanto por la vía legal, como por la política”, recriminó.
La crítica se basa en el pronunciamiento de los populares en un pleno de 1999, en el que votaron en contra de instar a la Xunta a declarar Bien de Interés Cultural el edificio de Cluny dado que es el primero que se construyó en Gran Vía (data de 1904); y de conservar el uso escolar de la parcela. La propuesta se aprobó. En octubre de 2008, sin embargo, la oposición planteó una moción en el consejo de la Gerencia de Urbanismo en la que demandaba que la parcela se mantuviese como dotacional y se evitase así la calificación residencial, ya que había caducado la suspensión de licencias activada con el Plan del Ensanche. La petición fue respaldada por unanimidad, y la sociedad de Karpin reclama 29 millones de indemnización.
