Semana Santa en Portugal: diez planes en familia para disfrutar como un niño

Cruzar "a raia" durante las vacaciones (y no solo para ir a las múltiples ferias de Portugal) es casi una tradición entre los gallegos. Y con las vacaciones de Semana Santa serán muchas las familias que visitarán el país vecino.

Portugal ofrece multitud de actividades de ocio para todos los públicos. Pero también, y particularmente, para los más pequeños de la casa. Alguna de ellas, como su mayor parque de atracciones, reabrirá sus puertas coincidiendo con la Semana Santa. Pero hay más. Mucho más. A continuación te proponemos diez planes que podrás difrutar con niños (y también como un niño) en Portugal durante los próximos días festivos.

Si viajas en coche, ten cuidado en las rotondas: tomarlas 'a la española' no solo puede acabar en multa, sino también en accidente.

1. Parque de atracciones Magikland

Viaje por el parque de atracciones más próximo a Galicia

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Varias generaciones de gallegos tendrán un déjà vu nada más pisar este parque de atracciones que reabrirá sus puertas coincidiendo con la Semana Santa 2023. Puede que en este no hayan estado nunca, pero probablemente sí en su hermano pequeño. Fue durante años uno de los grandes atractivos lúdicos para miles de niños y niñas de Galicia. En este enlace o bajo estas líneas puedes descubrir todo lo que ofrece para los más pequeños de la casa: fechas, precios, horarios, atracciones... (¡También tiene piscinas y está a solo 90 minutos de la frontera!).

Regresa Magikland, el único parque de atracciones de Portugal

2. Braga con niños

Braga es otro de los destinos más populares entre los gallegos. La preciosa ciudad del norte de Portugal (una de las más grandes del país) ganó recientemente un 'Óscar' del Turismo como mejor destino europeo. Uno de los atractivos para niños y niñas es su elevador del Bom Jesus, una joya histórica que todavía funciona 141 años después de su inauguración.

140 años de un funicular único en el mundo

3. El Miño en bicicleta

Naturaleza en estado puro: campos de cultivo, viñedos, fauna ribereña y un regalo que no perderás de vista y que te acompañará durante kilómetros y kilómetros de pedaleo: el Miño. Sí; el río en el que Galicia y Portugal se hermanan también se pedalea. Y no de cualquier forma, sino a través de una de las mejores ecopistas de Europa. Completamente llano, es apta para realizar con los 'peques'. Puedes conocerla mejor en este enlace o bajo estas líneas.

El Miño se 'navega' en bicicleta

4. Caminando entre leones

Ponerse cara a cara con el rey de la selva, casi acariciarlo y estar literalmente dentro de su recinto, junto a ellos, es uno de los muchos atractivos que ofrece uno de los planes de Semana Santa que se pueden realizar a tiro de piedra de Galicia. Concretamente, a solo 1 hora en coche.

El zoo está a solo 10 minutos en coche de Oporto, donde recientemente se ha inaugurado un mirador de vértigo que puede convertirse en otra buena opción si se visita esta ciudad lusa.

Un columpio en forma de chorizo y otras extravagancias balanceantes de Portugal

5. Un puente colgante de récord

Viaje a través del puente colgante más vertiginoso de Portugal

El puente colgante y peatonal 516 Arouca de Portugal se convirtió en 2021 en el más largo del mundo. Desde entonces, cientos de turistas, muchos de ellos gallegos, han viajado hasta el Geoparque de Arouca (a unas tres horas en coche de Galicia) para vivir la vertiginosa experiencia de atravesar esta estructura oscilante de 516 metros de largo y hasta 175 metros de altura. En este enlace o bajo estas líneas tienes toda la información.

Portugal estrena el mayor puente colgante del mundo a 3 horas de Vigo

6. Un jardín para cambiar de continente

Oriente está más cerca de Galicia de lo que cualquiera se pueda imaginar. O al menos un trocito. Una pequeña-gran Asia cuyo vergel despierta los sentidos. Un colorido remanso de de paz como el de Ponte de Lima, pero más lejos. Un oasis en medio de Portugal. El edén que presume de ser el jardín oriental más grande de Europa.

Sobrevolando el jardín oriental más grande de Europa

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A 350 kilómetros de "a raia", casi en medio de la nada, tras pasar el precioso pueblo medieval de Óbidos y a 1 hora de Lisboa, este desvío se ha convertido en una cita casi obligatoria para los turistas que deciden llegar hasta el distrito de Leiria. Si quieres conocer más, puedes consultar una información completa en este enlace o bajo estas líneas.

Oriente florece en Portugal

7. El Duero se navega en autobús

Los vehículos anfibio acaban de llegar a Oporto. La moda de los autobuses turísticos que pueden circular por tierra y agua y que funcionan ya en ciudades como Lisboa o Londres, ha atracado también en la segunda mayor ciudad de Portugal. Este 'chapuzón' seguro que le encantará a los más pequeños de la casa.

Por tierra y agua: Oporto se suma a la moda turística de los buses anfibio

8. Un viaje de vértigo en Portugal

Es el único teleférico de Portugal al norte del río Duero. Nada que ver con el de Gaia que se ubica frente a la ribera de Oporto. Este es mucho más largo, alto, se enclava en medio de la naturaleza y está más cerca de Galicia.

En la comunidad gallega no hay ningún medio de transporte como este. Pero el de Portugal está a solo una hora en coche desde la frontera con Tui, con lo que es un plan de vértigo para una escapada de un día.  Niños y niñas seguro que quedarán fascinados. Te contamos todo lo que debes saber sobre el Teleférico de Guimaraes en este enlace o bajo estas líneas.

Un viaje de vértigo en la cuna de Portugal

9. Un paseo de altura en Oporto

En uno de los jardines más espectaculares de Oporto —una joya natural y artística que pasa desapercibida para muchos turistas— se esconde desde 2019 un mágico camino de madera que permite caminar por las copas de los árboles.

Pero esta senda, de 250 metros de largo que discurre entre las ramas y permite darse un baño de naturaleza, no es más que uno de los muchísimos atractivos de este remanso de paz que muchos turistas se dejan atrás en su visita a la segunda ciudad de Portugal y que está a solo hoy y media de Galicia.

Un paseo de altura escondido en el gran vergel de Oporto

10. Passadiços do Mondego

Un lugar mágico hasta ahora inaccesible. Las pasarelas de madera están de moda. Estos caminos que permiten la visita a las entrañas de auténticos tesoros naturales se han ido multiplicando en los últimos años. Portugal es un claro ejemplo de este boom. Entre los más populares del país vecino están los Passadiços del Paiva, donde la kilométrica caminata incluye un paseo de vértigo a través de uno de los puentes colgantes peatonales más grandes del mundo: el Arouca 516. Pero hace escasos meses que cuenta con competencia en pleno corazón da Serra de Estrela.

La senda de madera discurre por el curso del río Mondego y dos de sus afluentes: Ribeiro do Barrocal y Caldeirão. Todo ello dentro del Geoparque da Estrela, reconocido por la Unesco. Si quieres saber más sobre este lugar, toma nota en este enlace.