Hace sol, se acerca el verano, el termómetro del coche marca más de 20º y entran ganas de playa. Pero al abrir la puerta ese calorcito desaparece. Era un espejismo. El día está frío. O más bien fresco. Algo no cuadra. La previsión meteorológica apunta a máximas de 23º en las Rías Baixas. Suficiente para tirarse en la arena. Pero la sensación térmica es otra. ¿Qué pasa? La respuesta está en el viento: sopla norte. "Este fin de semana no puede ser", te dices. Pero quizá hayas llegado a una conclusión errada. No puede ser en algunas playas, pero hay otras privilegiadas que podrían solucionarte la jornada playera. Son los búnkeres contra la nortada. Si sigues teniendo ganas de mar y arena, anota.
Sol y frío. Es la predicción meteorológica para el fin de semana en el sur de Galicia. Temperaturas mínimas de 8º pero 23º de máxima el sábado. Sin embargo el viento del norte impedirá que sientas ese calor. Pero el día de playa no tiene porque estar está perdido si sabes escoger bien. Y las rías gallegas son todo un privilegio en este tipo de jornadas. ¿Buscas una playa en la que no haga fresco? Apunta, porque mientras luzca el sol no tendrás que preocuparte del viento del norte en estos refugios.
Toralla
Vigo tiene muchas playas, pero pocas que se libren de la nortada. Sin embargo sí hay al menos una en la que este frío viento apenas se nota. Si hace sol, podrás estar tirado en la arena sin preocuparte del biruji. Se trata de las dos playas de la isla de Toralla. Particularmente la ubicada a la izquierda del puente en dirección a la isla. Eso sí, si vas en coche deberás dejarlo en O Vao. Los muros de las viviendas la protejen de este aire fresco.
Monteferro
En el área de Vigo, hacia el sur, hay otro enclave perfecto para poder tirarse en la playa los días soleados pero en los que hace pelete por el viento del norte. De hecho, hay una serie de calas más protegidas que las dos de Toralla. Monteferro es su guardian. Se trata de los arenales de Portocelo, Seixos Negros y Arribas Blancas.
O Morrazo
Al otro lado de la ría, en O Morrazo, todas las playas que miran hacia Vigo están protegidas de los vientos del norte. Pero su gran amplitud y la falta de una gran elevación a los pies de los arenales, como Barra, Limens o Nerga, impiden que el escudo contra la nortada sea siempre efectivo.
En Aldán, una buena opción es Area de Bon. Concretamente su extremo derecho que está orientado al sur y protegido del viento por una pequeña ladera y un pinar.
Ría de Pontevedra
En la ría de Pontevedra hay también varias alternativas para los días soleados con viento frío del norte. La gran mayoría en la zona de Poio y Sanxenxo, las zonas cuyas playas están orientadas hacia el sur.
Una de las mejores opciones es la playa de Area de Agra, cuyo arenal presume de doble protección contra el viento: un gran muro a pie de playa que frena el biruji del norte; y otro natural, al oeste, donde una elevación llena de árboles complementa el escudo protector contra la brisa del Atlántico.
Aunque la ubicación de estos arenales puede llegar a frenar el frío del norte y abrir la puerta a un día de playa en una jornada fresca, los muros que las protegen tienen también una desventaja: el sol se irá mucho antes de que termine el día.