Las casas de los próximos meses serán divertidas, al menos para aquellos que estén dispuestos a afrontar una pequeña remodelación al hilo de las nuevas tendencias decorativas. Los maestros del diseño de interiores han decidido que es el momento de revestir las estancias de colores vivos, muebles en diferentes tonalidades y tapicerías llamativas.
Parte de la culpa la tiene Wendy Goodman, una institución en Nueva York. Consiguió su primer trabajo en Harper's Bazaar como asistente de Anna Wintour y trabajó en varias publicaciones como "House & Garden". Finalmente se estableció como editora de diseño en la revista "New York". Durante más de treinta años ha profundizado en los hogares de los ricos, famosos y fabulosos. Ahora publica un libro en el que cuenta todas esas experiencias y de paso muestra algunas de las casas más originales del mundo. Ni que decir tiene que su corte de seguidores ya ha tomado buena nota de muchas de las estancias que aparecen para tratar de plasmarlas, de algún modo, en sus residencias.
La mezcla loca de tonalidades y texturas es uno de los secretos para lograr un ambiente desenfadado. Detalles como el jabalí disecado que aparece en la imagen superior sólo son aptos para un tipo de público, aunque la originalidad resulta innegable.
Goodman ha visitado las casas de Gloria Vanderbilt, Richard Avedon, Hervé Pierre y Tony Duquette, por nombrar algunos. No siempre fue fácil convencer a las personas para que le dejaran entrar en sus hogares para hacer reportajes, pero finalmente lo consiguió.
Entre sus lugares favoritos destaca la sala de estar de Diana Vreeland o una de las habitaciones de la casa de Richard Avedon, con tablones de anuncios en todas las paredes.
