El año que empieza va a ser el primero de una nueva era en la que la conectividad será el motor de la práctica totalidad de industrias del planeta. La red 5G, de la que ya llevamos años escuchando hablar, podrá ser experimentada por el público en 2019 y, pese a que este año solo veremos tímidos avances personificados en algunos teléfonos móviles -Samsung y Huawei ya lo han confirmado-, será el principio de una revolución para muchas industrias.
La red 5G permitirá -de una vez por todas- el desarrollo de las ciudades inteligentes. Gracias a la gran capacidad de esta red, el ingente volumen de datos que requiere una Smart City eficiente -y real- se podrá gestionar sin problemas. De igual forma el mayor alcance y el menor consumo energético habilitará a estas ciudades a ser parte fundamental del día a día de las personas, los vehículos y los hogares.
Las casas conectadas se van a ver inmersas en una transformación, y no solo por el 5G, sino por una tecnología que ya irrumpió con fuerza en 2018: los asistentes virtuales. En 2015 Amazon presentó el Echo, su primer altavoz dotado de inteligencia artificial. Pero no fue hasta el año pasado cuando esta tecnología se catapultó hasta los hogares de todo el planeta. La coexistencia de Apple con Siri y Google con su Assistant, además de Amazon y su Alexa, ha provocado que la competencia -bendita competencia- entre ellos obligue a estos gigantes tecnológicos a desarrollar al máximo esa tecnología. Y este año será el turno de aprovechar esos asistentes con la iluminación, los televisores, las cámaras e incluso electrodomésticos que ya funcionan con la voz.
2019 nos va a traer -de nuevo- sustos en forma de ataques informáticos, tanto a las empresas como a los particulares. La mayoría de tecnologías actuales, inmersas en un constante desarrollo, son un objetivo demasiado atractivo como para qie los hackers lo dejen pasar. Los bulos, que campan a sus anchas por las redes sociales y por aplicaciones de mensajería como WhatsApp, van a ser todavía más protagonistas de lo que fueron en 2018. Lo peor está por llegar.
Revolución visual
Posiblemente el sector que más va a cambiar a partir de este año será el audiovisual. El pasado año Panasonic fue la primera gran marca de electrónica de consumo en presentar una videocámara capaz de grabar con resolución 8K, el doble que el 4K y 16 veces más que el FullHD. Y en 2019 será el gran momento de los televisores, habida cuenta de que otras firmas también tendrán cámaras 8K. Todas las grandes marcas, desde LG hasta Sony, pasando por Samsung y Panasonic, y alguna no tan grande, tendrán este año televisores con esa resolución. Estos nuevos productos marcarán el camino de lo que tendremos en los salones de casa en los próximos años: una resolución de pantalla que muestra unas imágenes tan nítidas que casi parecen irreales. Y en Japón ya emiten en 8K...
Y como se suele decir, hemos dejado lo mejor para el final. 2019 será el año de las pantallas flexibles. El pasado ejercicio ya vimos los primeros teléfonos -como el prototipo de Samsung-, que tendrán continuidad este año con otros de Huawei y LG. Y es precisamente esta última quien ha hecho saltar la banca con un revolucionario televisor enrollable que desaparece cuando no se está viendo. Es, de lejos, lo más impactante que se verá -si se deja ver- este 2019. ¡Qué año nos espera!
