Dicen que es el pez más primitivo del planeta y el único que puede considerarse prehistórico. Lo tildan de feo pero nadie renuncia a esta suculenta delicatesen de la que tanto se ha escrito. Y aunque en fresco está en pleno apogeo hasta los meses de abril o mayo, también se degusta en verano. Especialmente en su templo, en Arbo, concello vinculado a este ciclóstomo desde hace siglos a través del Miño. Este fin de semana se exalta en la XXIII edición de la Festa da Lamprea Seca que transcurre en la Carballeira de Turbela.
Del antediluviano ciclóstomo se han vertido ríos de tinta, y de algunas plumas geniales. Álvaro Cunqueiro decía que lo que comen algunas de las figuras representadas en el Pórtico de la Gloria de la catedral compostelana es empanada de lamprea. Tanto el fabulador mindoniense como José María Castroviejo o Cela "prescribían" el ciclóstomo del Miño en el plato. Torrente Ballester recogía algunos viejos cuentos sobre la lamprea, como el que decía (con sorna) que el año que caían más personas al río Baralla, más rico sabía luego el ciclóstomo.
Al mindoniense le gustaba la empanada de lamprea, mientras que Picadillo y Pardo Bazán defendían el uso de la canela para sazonarla. Sea como sea, no deja indiferente a nadie. Nacida en el río, una vez que completa su desarrollo llega al mar, donde vive entre dos años y cinco años, para regresar a las aguas dulces de donde procede con el objetivo de desovar y morir. Es el momento justo para su captura, cuando su textura en boca está en su punto óptimo.
Probablemente no haya otro pueblo en el mundo con una tradición tan arraigada como tiene Arbo alrededor de este pez prehistórico. Durante todo el año, el secado y ahumado de la lamprea permite elaborar otros platos, y hace veintitrés ediciones que la exaltación es todo un éxito. El rico ahumado admite el relleno de huevo y jamón, pero también puede tomarse con fideos y guisantes. Existen otras preparaciones, con pimiento morrón o aceitunas, para luego servirla en rodajas muy finas acompañada de salpicón. También en empanada, a la brasa o frita rebozada. De manera paralela a la cita gastronómica, durante el fin de semana se celebrarán diversas actividades para todos los públicos.
La lamprea seca permite degustarla todo el año, especialmente en los concellos de larga tradición con el ciclóstomo, como As Neves, en toda la comarca de O Condado y A Paradanta, en el Baixo Miño y mucho más allá de la raya.
