A primera vista puede parecer que la innovación que se está viviendo en todos los ámbitos de la vida no está afectando a las cocinas domésticas. Hornos, neveras, vitrocerámicas, lavavajillas... Bien parece que son iguales ahora que hace 20 años. Pero la realidad es que el 'Internet de las cosas' ha aterrizado también en la cocina, aunque por el momento sus elevados precios hagan que estas maravillas tecnológicas solo estén al alcance de unos pocos.
La firma coreana LG tiene en el mercado varios modelos de neveras conectadas 1 que incorporan una pantalla táctil en una de sus puertas desde las que se pueden realizar numerosas tareas, desde ver una película hasta hacer la lista de la compra y compartirla con alguien. Aunque lo mejor es que se puede incluso hacer esa compra desde el propio frigorífico.
Samsung ha conseguido una innovación sorprendente con sus nuevos lavavajillas WaterWall 2, una tecnología que limpia de esquina a esquina 3 mejorando el rendimiento de lavado y ahorrando agua en el proceso.
Los hornos de toda la vida son ya los hornos del futuro. Firmas como la alemana Siemens tiene en el mercado hornos inteligentes 4 que se conectan con una aplicación para móviles Apple y Android. Estos hornos incorporan además la función de microondas, tienen un display TFT táctil y se limpian de forma automática. La app permite controlar la temperatura del horno y monitoriza incluso la comida gracias a la termosonda que incluye.
Aunque el electrodoméstico conectado más sorprendente que se verá en una cocina durante los próximos años se ha creado en España. La empresa valenciana Rak Ceramics ha creado Cookingrak 5, la primera encimera inteligente en incorporar una cocina de inducción que es invisible. La encimera está construida con una fórmula de resinas y materiales conductores de la electricidad que permiten a las microondas de la cocina de inducción que está incrustada bajo la encimera transmitir el calor y cocinar sobre la encimera en unas ollas especiales. Y todo se puede controlar y activar desde su propia app móvil.
Lo de las manos "en la masa" habrá que cambiarlo por "en el móvil" desde ahora...
