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Todo lo que Pekar escribió para Crumb

"American Splendor. Los cómics de Bob y Harry" reúne las colaboraciones entre las dos grandes estrellas del cómic "underground" estadounidense

Portada de "American Splendor. Los cómics de Bob y Hard.

En el otoño de 1962, el jazz antiguo unió en un piso de Cleveland Height a Harvey Pekar y Robert Crumb. El primero, un clevelander de 22 años, era desinhibido, de aspecto vulgar y desaseado. El segundo, de 18 años, era un flaco introvertido, gafudo y con dientes de chivo que venía de Filadelfia. Después de reunirse en varias ocasiones para oír be-bop en el tocadiscos, beber cerveza y ojear "Play Boy", un amigo común pidió a Crumb que le enseñase a Harvey los cómics que hacía. Era el cuaderno donde estaba dibujado "El gran libro Yum Yum". "Nunca había visto nada como aquello. Me atrapó", escribió años después Pikar.

En el Cleveland en declive, Crumb entró de colorista en "American Greetings Cards," una importante compañía de tarjetas de felicitación, donde pronto pasó a ser un artista destacado sin dejar de sentirse incómodo todo el tiempo. También empezó a frecuentar la bohemia porrera y se despegó de su timidez para conocer a su primera mujer.

Antes de que Crumb se convirtiera en San Francisco en la figura del cómic underground más conocida gracias a "Zap Comix" y a la portada de un disco de Janis Joplin, en Cleveland ya lo recibían como una celebridad. Cuando pasaba por Cleveland, Crumb quedaba en casa de Pekar.

A Harvey también le interesaban los cómics y a mediados de los setenta, divorciado, deprimido, empleado en el archivo de un hospital de veteranos, mascullaba escribir guiones lejos de los tebeos de superhéroes, en un espacio inexistente entonces, una vez desinflado el mercado underground. En una visita de Crumb, que no estaba en su mejor momento económico, acompañado de su amigo Bob Armstrong, músico y dibujante, Pekar enseñó unos relatos a sus huéspedes. Les gustaron, volvieron a sus casas, los ilustraron, los editaron y así nació para el cómic Harvey Pekar, un insólito guionista del cómic autobiográfico que desperdigó su vida en las planchas de una variedad de artistas y acabó autoeditando su propia revista "American Splendor", cuyas historias inspiraron la película homónima de 2003, le llevaron al show de David Letterman y a recibir premios de cómics de primer nivel.

"American Splendor. Los comics de Bob y Harv" (La Cúpula) reúne las historias que envió a Crumb a lo largo de casi 30 años este locuaz egotista, cronista de acera de Cleveland, recopilador de anécdotas humanas, grabador de conversaciones al vuelo y narrador de microrrelatos cotidianos. Hay hallazgos excepcionales entre el material corriente de las vidas normales y no se puede dejar de leer esta especie de Instagram negativo (valga el oxímoron).

Harvey Pekar fue encontrado muerto en 2010 por su tercera esposa. La causa fue una sobredosis de antidepresivos (accidental, se dictaminó) cuando se enfrentaba a su tercer cáncer. Está enterrado junto a Eliot Ness. Robert Crumb tiene 73 años, vive en el sur de Francia desde hace 27 y no piensa regresar a Estados Unidos porque considera magnífico el sistema público de salud francés.

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