Christian Bale, en una secuencia de "La gran apuesta", en la que comparte protagonismo con Steve Carrell, Brad Pitt y Ryan Gosling. // Paramount
Comedia? ¿Drama? ¿Tragedia? Una mezcla de los tres géneros se entrelaza en "La gran apuesta", una visión entre bastidores del hundimiento de la economía mundial en 2008. La película, que se estrena este fin de semana en la cartelera española, describe la arriesgada apuesta de cuatro individuos que supieron anticipar los efectos de las hipotecas basura en Estados Unidos, la burbuja inmobiliaria que desembocó en una crisis financiera global que ni el sector bancario ni los organismos reguladores fueron capaces de predecir.
Dirigida por por Adam McKay y protagonizada por Christian Bale, Steve Carell, Ryan Gosling y Brad Pitt, "La gran apuesta" está nominada a 5 Óscar: Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Adaptado, Mejor Actor de Reparto (Christian Bale) y Mejor Montaje. La película está basada en una historia real recogida en el libro del mismo título escrito por Michael Lewis.
En 2005, el gestor financiero Michael Burry (Christian Bale) realiza un alarmante descubrimiento: miles de préstamos hipotecarios morosos quedarán impagados en los próximos años. Los banqueros de Wall Street y las agencias gubernamentales de regulación ignoran la grave crisis que está a punto de estallar ligada a la burbuja inmobiliaria. Burry inventa un instrumento financiero denominado "seguro de impago de deuda" a fin de "vender al descubierto" en el mercado inmobiliario en auge. Comienza así una operación a la que se irán sumando otros personajes dispuestos a obtener sabrosos beneficios económicos: un avispado banquero de Wall Street (Ryan Gosling), un gestor de fondos alternativos (Steve Carell) y otro hombre de la Banca convertido en ecologista (Brad Pitt).
Unos inversores inconformistas que utilizan sus conocimientos y sus contactos para realizar una arriesgada apuesta contra Wall Street. Más que mostrar una fábula sobre la codicia institucional, la película se centra en personas y sucesos reales. Como señala el director de la cinta y guionista Adam McKay, el libro de Michael Lewis en el que está basada le atrapó: "Nunca había leído un libro que tuviera tantos tonos y capas diferentes. Los personajes eran fascinantes y estaban muy bien dibujados; era trágico y bastante informativo. Era de esos libros híbridos y apasionantes al mismo tiempo". De ahí su ilusión por llevarlo a la gran pantalla. Las cinco nominaciones a los Óscar avalan el trabajo realizado.
