Vitrasa lamenta "un nuevo ataque vandálico" a un autobús de Vitrasa, en el marco de la huelga indefinida convocada por el comité de empresa desde el lunes, 13. Según explica la empresa, a las seis de la mañana aproximadamente, dos encapuchados pararon un autobús de la línea C3 en un paso de cebra en la avenida de Redondela y realizaron diferentes pintadas en el exterior del vehículo, además de romper el limpiaparabrisas. Estos hechos dejaron totalmente inmovilizado el bus, que no pudo continuar con el servicio. En ese momento no se encontraban viajeros a bordo.

La empresa indica que con este ya son 13 actos violentos en autobuses urbanos, a los que hay que añadir la colocación de clavos camuflados en paradas, rotura de un WC destinado al personal de conducción en ruta y graves intimidaciones a una conductora que realizaba el servicio.

Ante estas acciones "de alta gravedad", indica la empresa, interpuso las correspondientes denuncias por suponer hechos constitutivos de delito.

Vitrasa lamenta todas las molestias que esta situación ocasiona a la ciudadanía y garantiza la prestación de unos servicios mínimos que se pueden consultar en www.vitrasa.es, en las redes sociales y en los teléfonos de atención al viajero 986 29 16 00 / 986 20 74 74.

El BNG solicita un expediente sancionador a la empresa

El Bloque Nacionalista Gallego, por su parte, solicitó la apertura de un expediente sancionador contra Vitrasa ante "los graves incumplimientos e irregularidades en el servicio de bus urbano de Vigo". El grupo nacionalista reclama que el Gobierno municipal tome medidas por los recortes de líneas aplicado unilateralmente por la empresa aprovechando la huelga, así como por los servicios mínimos, que "fueron declarados judicialmente como ilegales por abusivos, el incumplimiento de los tiempos de descanso del personal conductor y la existencia de contratos laborales irregulares". Así lo anunció públicamente el portavoz municipal del BNG de Vigo, Xabier P. Iglexas, después de mantener un encuentro este martes con el Comité de Empresa de la concesionaria.

"Exigimos que el gobierno de Abel Caballero pase de la complicidad con Vitrasa a colocarse del lado de la ciudad y atender las legítimas y razonables reivindicaciones del personal", manifestó en rueda de prensa Iglexas, que reiteró la solicitud de que el Ayuntamiento convoque una reunión entre la dirección de la empresa y la representación sindical para procurar una salida acordada

Iglexas criticó que el alcalde de Vigo, Abel Caballero, se niegue a recibir el Comité de Empresa y se "esconda de manera cobarde" cuando "presume de que habla todo el tiempo con todo el mundo". El concejal nacionalista recordó que este no es un conflicto personal, como defiende el regidor, al tratarse "de un servicio de titularidad municipal en el que cada año el Ayuntamiento inyecta 13 millones de euros de las viguesas y vigueses para bonificar las tarifas".