Extendemos las alas sobre la villa costera de Santa María de Oia. Una hermosa conjunción de tierra y mar que nos regala un gran patrimonio de arte rupestre, un monasterio cisterciense del siglo XII como gran joya arquitectónica, y una riqueza natural de montes y sierras desde donde otear la inmensidad del Atlántico.

Sigue a Galidrone en: