Las fresas tienen pocas calorías, muchas vitaminas y fibra, ayudan a evitar la retención de líquidos y a disminuir el colesterol malo. Son un antiinflamatorio natural y un potente antioxidante, reduce el apetito y mejoran la circulación sanguínea.
Para seguir la dieta de la fresa es importante seguir estas directrices:
-Hacer cinco comidas al día.
-Beber dos litros de agua diarios.
-Comer unos 400 gramos de fresas en cada una de las ingestas.
Tomar mínimo 1 infusión al diario.
-Evitar refrescos azucarados y bebidas alcohólicas.
Ejemplo de un menú en la dieta de la fresa
- Desayuno: fresas, leche vegetal y avena.
- Media mañana: 350 gramos de fresas
- Comida: menestra o sopa de verduras con pechuga de pollo o filete de merluza y de postre fresas
- Merienda: 350 gramos de fresas.
- Cena: fresas con un yogur desnatado.