Luis es un hombre de 48 años con síndrome de Down que ha vuelto a casa después de estar ingresado en el hospital de Ourense. Allí acudió por culpa del COVID y permaneció durante tres semanas. Incluso una de esas semanas, en estado crítico, en la UCI. Todo el personal se volcó con él y él se ganó a todos. Las videoconferencias le ayudaron a ubicarse, hasta recibir el alta.
