Un grupo de buceadores se sumergió en la noche del viernes en el entorno de la playa de Arneles, en la ribera de O Hío que baña la ría de Aldán. Una inmersión que aguardaban con gran expectación y que se saldó con una enorme decepción: los fondos marinos de una de las zonas más frecuentadas y hermosas de esta ría están plagados de basura y, lo que es mucho peor, sin rastro alguno de zostera. Los bosques de esta alga son fundamentales para la conservación de la fauna marina y aportan oxígeno. La ausencia de zostera es una evidencia del daño que ocasionan los fondeos incontrolados en la ría, tal como denuncia la Plataforma Augas Limpas, que reclama una limpieza de fondos y que se limite el fondeo de embarcaciones.
