Del “sepulcro” salió a hombros el Cristo Resucitado. Después, la procesión recorre las cales Estrella, la calle Real, Eduardo Vincenti, Montero Ríos, 25 de Xullo hasta llegar al cruce de Castelao, donde se produce el encuentro entre el Cristo Resucitado y su madre, que ayer estaba representada por la nueva imagen de esta cofradía: La Virgen de la Aurora, que había sido bendecida antes por el párroco.
