Debería ser una de esas secuencias que nos hacen admirar la belleza de los seres que habitan bajo las aguas. Tiene todos los ingredientes para que así sea, empezando por su protagonista, una hermosa raya de color violáceo. El problema surge cuando el ejemplar avanza en su paseo por el fondo de aguas mediterráneas. Se encuentra plásticos de todo tipo. Y esto es solo una muestra del vertedero en el que se está convirtiendo los océanos, donde cada año acaban 13 millones de metros cúbicos de plástico. Las imágenes fueron grabadas con el ROV del buque 'Artabro', de la empresa ACSM, que participa en la instalación del cable submarino más largo del mundo.