Atípica pero no por ello menos deseada. La ilusión sigue intacta y miles de personas se dieron cita en el Ifevi para disfrutar de la cabalgata de Reyes a prueba de lluvia. Así, desde las 11.00 horas, Sus Majestades de Oriente recibieron a las familias que plantaron cara al viento y la lluvia. Entre las carrozas con más éxito, la de los bomberos que, al tratarse de una cabalgata estática, se permitió a los niños que subieran al camión. Las pompas del barco de la empresa viguesa Coterena y los camellos de globos de Barafunda también causaron sensación. A los favoritos de los más pequeños también se sumaron los participantes de la Escola Municipal de Teatro, vestidos con trajes de luces, que jugaron con ellos lanzándose bolas que cambian de color.
