La Guardia Civil investiga a tres vecinos de Vigo que se hicieron pasar por policías españoles para quedarse con unas joyas valoradas en 4.000 euros que habían sido vendidas en Portugal. La policía lusa advertía de que los investigados se habían personado en un establecimiento de compraventa de oro y joyas de este municipio, en el que dos de ellos se identificaron como policías españoles, exhibiendo carteras con placas aparentemente oficiales.

Solicitaron a la empleada del establecimiento la entrega de unas joyas que había vendido días atrás la tercera persona que los acompañaba, alegando que todas ellas procedían de una investigación judicial que se estaba llevando en España por robo.