La pandemia del coronavirus ha provocado que gestos tan cotidianos como puede ser pulsar un botón se conviertan en una actividad de riesgo. Es el caso, por ejemplo, de las populares máquinas de vending (máquinas automáticas de venta) que cientos de personas toquetean cada día para comprar un café, una chocolatina o cualquier otro producto. Una inocente actividad que multiplica el riesgo de contagio por Covid-19. A partir de ahora la probabilidad de que el virus salte de mano en mano a la hora de adquirir algo en estas máquinas queda reducido en el Hospital Álvaro Cunqueiro.