Este miércoles tras llegar con su nieta Ana Sandra en brazos, Ana Obregón ha salido por fin de su casa junto a sus hermanas y se ha parado durante unos instantes a charlar con la prensa. Con una inmensa sonrisa, ha detenido su vehículo a las puertas de la urbanización en la que reside en La Moraleja para revelar cómo se encuentra tras haber cumplido su sueño de ser abuela.