Uno de los productos más demandados en las Navidades para las cenas es el percebe. Están a casi 200 euros el kilo. Parte de ese precio viene de lo difícil que es su captura. Con un ojo en las rocas y otro en el mar, así trabajan los percebeiros en busca de este preciado marisco que la marea baja deja a su alcance. Hay que tener reflejos y estar en forma. José Manuel es el más veterano, lleva 50 años cogiendo percebe, desde los 14. Se protegen como pueden de las embestidas de las olas y no dudan en lanzarse a un mar embravecido para acceder a una zona mejor. Una pequeña pausa preparándose para la siguiente ola y continúan con su labor. Mantienen reservada esta zona de A Virxe da Barca, en Muxía, para la campaña de Navidad. Este año, con avisos en el mar por viento y oleaje, el precio aumenta. Tienen un tope de 7 kilos por persona y día. De aquí van a la subasta en la lonja. Los mejores ejemplares ya han llegado a los 200 euros y en los próximos días el precio subirá.
