La magistrada que este martes presidió la sesión del macrojuicio por el accidente ferroviario de Angrois no pudo contener las lágrimas ante las declaraciones de los supervivientes de la tragedia. Las víctimas del Alvia han relatado cómo, casi diez años después, siguen intactos el dolor y la impotencia por un accidente de tren que, según ellos, pudo evitarse. Hoy se empiezan a escuchar los testimonios de los familiares de los 80 fallecidos y heridos para los que "no va a haber dinero que lo pueda pagar, porque yo era una persona sana".