Los trabajadores de Ganomagoga se lanzaron este jueves a la calle para reivindicar sus derechos y lo hicieron, pese a las inclemencias del tiempo, de forma multitudinaria. Luchando por los 200 puestos que penden de un hilo tras el ERE extintivo anunciado el grupo al que todavía pertenecen, los afectados realizaron una protesta que comenzó en las instalaciones que la firma y culminó en el Concello de Ponteareas: más de 2.500 metros de marcha que concentraron a unas 300 personas entre empleados, allegados y vecinos.