Ataviados con luces los devotos del lunes de Cristo pudieron procesionar por las calles de Redondela. Sucedió a partir de las diez de la noche, cuando todavía el municipio se encontraba sin luz, dejando esta curiosa estampa en la localidad. Pudiendo desarrollar con «normalidad» uno de sus festivos locales, sacando al Cristo a las calles.