El gigante del comercio en línea Amazon ha abierto al público en Seattle, noreste de Estados Unidos, un supermercado "inteligente" en el que no existen los donde el cliente no tendrá necesidad de pasar por la caja. Lo hace, eso si, con un año de retraso después de que, según la prensa estadounidense, el grupo propiedad Jeff Bezos consiguiese solventar una serie de problemas técnicos que impedían finalizar el proceso de compra de forma correcta.

Fue a finales de 2016 cuando se presentaba Amazon Go, el concepto de tienda física, de unos 170 metros cuadrados, en la que ofrece esencialmente productos de alimentación. "Creamos la tecnología de shopping más avanzada del mundo para que no tengas nunca más que esperar una fila", afirma el grupo el domingo en su sitio web, al anunciar la apertura al público del supermercado.

¿Cómo funciona el supermercado de Amazon?

Una serie de sensores combinados con inteligencia artificial -similar a la que usan los coches sin conductor- que permiten a las computadoras "ver" y aprender de los clientes han permitido a Amazon la apertura del supermercado en el no hace falta pasar por caja para pagar lo que se compra.

El funcionamiento de este 'supermercado inteligente' es muy simple para los clientes. Tan solo requiere la descarga de una aplicación en el teléfono móvil, que se activará cuando se cruce la puerta de acceso del local. Será desde ese punto cuando se activen los sensores dispuestos por todo el local y los visitantes puedan llenar su carrito como en cualquier establecimiento de este tipo y marcharse sin pasar por la caja.

Esta tecnología, explican Amazon, "detecta automáticamente cuándo se sacan los productos de las estantería o se cuándo se vuelven a colocar al llevar un registro virtual del carrito. Cuando termines de comprar, puedes simplemente abandonar la tienda. Poco después te enviaremos un recibo y lo cargaremos a tu cuenta Amazon", detalla en la web.

No es la primera vez que el gigante del comercio electrónico abre una tienda física: en 2016 inauguró su primera librería también en Seattle, donde tiene su sede. Desde entonces abrió otras, entre ellas una en Nueva York en mayo pasado. Su interés por los comercios tradicionales se evidenció en junio de 2017, cuando el grupo anunció la compra de la cadena de supermercados estadounidenses de comida orgánica Whole Foods.

Amazon: la venta online de alimentación

Amazon se divierte complicando la carambola de la logística. El gigante mundial del comercio electrónico quiere convertirse en un completo supermercado virtual con entrega a domicilio en tiempo récord. La compañía norteamericana inauguró en 2016 en España los servicios de Amazon FreshAmazon Fresh, un portal específico que incluye un catálogo de productos frescos y congelados que se envían a casa en un máximo de dos horas. De momento solo está disponible en Madrid y otras 19 localidades limítrofes a la capital española.

Un servicio de distribución específico de productos perecederos donde el pescado y demás productos del mar adquieren protagonismo. Fresco, ahumado o congelado con variedad de especies como lenguado, salmón, langostino o bacalao, además del popular surimi. En el estreno de esta fiesta de las "entregas ultra-rápidas" se colaba entonces la compañía pesquera de referencia en España: Pescanova.

La comercialización de productos pesqueros está en auge por todas partes, con Europa, Estados Unidos y China a la cabeza de un mercado que prevé crecer un 4% anual hasta 2020, según la consultora Market Research (Global Fish and Seafood Market). Los canales de distribución de la industria gallega -la mayor de la eurozona, con más de 2.500 millones de ventas al año- son los habituales: gran distribución (supermercados e hípers), food service (catering), mayorista, cross trading (intermediación) y, en algunos casos, venta minorista (Hiperxel, Pescanova o Pereira). Pero un nuevo modelo llama a la puerta: el comercio online. Y llega con acuse de recibo de un remitente que no conviene obviar: el gigante norteamericano Amazon.