El teléfono móvil y la seguridad vial parecían dos conceptos antepuestos hasta la aparición, en marzo de 2014, de la aplicación Social Drive, con la que los conductores de cualquier punto de España pueden conocer en tiempo real las incidencias del tráfico que van aportando los dos millones de personas que ya se la han descargado.

Gracias al boca a boca, la aplicación se ha ido esparciendo entre los conductores de todo el país con la idea con la que nació: que los usuarios "puedan intuir lo que se van a encontrar en la carretera antes de salir", explica uno de sus creadores, Sergio García.

García (Fene, A Coruña, 1986), que se unió a su amigo y programador informático Javier Regueiro, de 29 años, para dar vida al esbozo que tenían en mente, sostiene que "la app mejora la seguridad vial, no es para evitar controles".

El uso de Social Drive es sencillo: una vez localizada la situación del conductor o una vez que éste establezca la ubicación manualmente, aparecen en la pantalla las diferentes alertas, que pueden ser un control en la vía (silbato rojo), un radar (símbolo azul), otro tipo de incidencia (triángulo amarillo) o la vigilancia desde el aire de la Guardia Civil (helicóptero verde).

Aunque al principio diversos sindicatos de los cuerpos de seguridad se mostraron reacios a esta iniciativa por la posibilidad de que los usuarios pudiesen evitar controles y radares, Sergio asegura que la relación "ha evolucionado favorablemente" y que de hecho ahora están en contacto directo con la Dirección General de Tráfico y su proyecto DGT 3.0.

"En ese sentido estamos tranquilos porque comprenden que la funcionalidad de la aplicación no es otra que mejorar la seguridad", sostiene el fenés, que explica que la colaboración se basa en el intercambio de avisos que son compartidos en una nube común de incidencias "con la intención de recopilar la máxima información posible".

Sergio García es el responsable de marketing de Social Drive, que tiene su sede en el centro de negocios Arena76 de Narón (A Coruña), donde también trabajan Regueiro y otros cinco empleados más.

Desde allí gestionan la moderación de las alertas, que primero pasan por un filtrado automático que detecta si están repetidas, posteriormente los encargados determinan si son válidas o no y, por último, si está todo correcto, son enviadas para que aparezcan en la zona en la ubicación adecuada.

A pesar de que en los grupos de Facebook o de WhatsApp, en los que se comenta la situación del tráfico, es habitual el envío de fotografías, en Social Drive han preferido no incluirlas porque, en primer lugar, "las instantáneas a los agentes de la autoridad están prohibidas por ley" y, por otro lado, en el caso de los accidentes, "supondrían un obstáculo a mayores para los usuarios", dice Sergio.

En total, cada jornada moderan cerca de 3.000 avisos en todo el territorio español, donde la comunidad de Madrid es la que suma un mayor número de conductores que utilizan la aplicación, seguida de Galicia y Baleares.

En el archipiélago, por ejemplo, "el número de usuarios aumentó en 40.000 en menos de tres meses", resalta Sergio García, y también apunta que la clasificación entre las ciudades la lidera Madrid capital, mientras dentro de Galicia la tabla está encabezada por A Coruña y Pontevedra.

"Ahora queremos crecer un poco más en España y, en el futuro, extendernos probablemente a Portugal y Latinoamérica", asegura este emprendedor, que anuncia que no dejarán de "seguir perfeccionando la aplicación" pues, aunque hasta ahora Social Drive "ha vivido un boom", tienen "los pies en la tierra" y saben que "en cualquier momento puede aparecer otro servicio similar".