Precisó que el fallo no retrasará en principio el programa Vera, la lanzadera de iniciativa italiana y de pequeña capacidad con la que la ESA espera completar su gama de cohetes.

"Tenemos margen para solucionar el problema dentro de los plazos, todavía no estamos en la fase crítica, se trata sólo del segundo test", aseguró.

El responsable de la ESA aseguró que la prueba deberá ser repetida una vez que se conozcan las conclusiones de la comisión de investigación.

El fallo se produjo 35 segundos después del arranque del motor Zefiro 9, el que debe impulsar el tercer piso del pequeño cohete.

Tras haber funcionado correctamente durante ese corto periodo de tiempo, el motor sufrió un brusco descenso de la presión, indicó.

"Ahora tenemos que verificar lo que no ha funcionado y tratar de aportar las modificaciones que sean necesarias", señaló el responsable, que recordó que en diciembre de 2005 el motor funcionó correctamente en su primer test de arranque.

Con el cohete Vera, la ESA espera completar su gama de lanzaderas espaciales, compuesta en la actualidad por el potente Ariane-5, capaz de transportar hasta diez toneladas de carga útil, y por el ruso Soyuz, considerado de mediana capacidad.