Consolidado como un estilo de vida más desde hace décadas, el veganismo sigue sumando seguidores y detractores. Los últimos en pronunciarse han sido los profesionales de la Academia de Medicina belga, que han desaconsejado las dietas veganas en bebés, niños y adolescentes, así como en mujeres embarazadas y durante la lactancia. Su recomendación, no obstante, ha llegado hasta el punto de proponer que los padres y las madres veganas fueran llevados a juicio por alimentar a sus hijos con una dieta 100% vegetal. Pero ¿es realmente peligroso seguir esta dieta?
Los nutricionistas consultados coinciden en la rotundidad y en la respuesta. No. Ahora bien, recomiendan consultar con un profesional que nos ayude a planificar bien la alimentación para que ésta sea sana, variada y equilibrada. "Hay que tener en cuenta que seguir una dieta vegana no quiere decir que sea saludable de por sí, puesto que hay opciones, como platos preparados, dulces, fiambres... que también contienen un exceso de azúcares, sal, grasas saturadas o procesados", advierte Ariane Soria, dietista-nutricionista de Nut&Health.
Además, los expertos nos enseñarán a cocinar nuevos platos y a descubrir distintas formas de presentarles la comida para que les resulte más apetecible. Otra de las claves es no obligarles a comer, pero tampoco presentarles una opción B. "Por ejemplo, si no quieren las espinacas que hemos cocinado para hoy, no debemos ofrecerles unos espaghettis para que coman algo, si no que lo recomendable es que se queden sin primer plato y ya está porque si no siempre recurrirán a la alternativa", indica esta experta. O "si no le gusta la coliflor se la podemos camuflar dentro de un puré con calabacín, zanahoria y patata, por ejemplo", propone. Lo importante es tratar de huir de los potitos preparados o elegir los que no tienen sal ni azúcares añadidos.
"Toda dieta vegana o vegetariana debe complementarse con un suplemento de vitamina B12" - Adriana Oroz, dietista-nutricionista de Alimenta
Una de las cosas más importantes es que toda dieta vegana o vegetariana debe complementarse con un suplemento de vitamina B12. "En el caso de los niños también, a partir de los sietes meses de edad", destaca Adriana Oroz, dietista-nutricionista de Alimenta. "La razón es que en las personas que no siguen esa dieta toman esa vitamina a través de la carne, porque se les da a los animales, pero en el caso de ser vegano o vegetariano la B12 debe ser ingerida de forma directa", explica.
Los niños veganos o vegetarianos deben tomar vitamina B12 en forma de suplemento.Shutterstock
Leche y proteínas de origen vegetal
Al igual que la dieta de un bebé no vegano, la alimentación de un bebé vegano se compone principalmente de leche. Hasta los doce meses, la leche -materna o de fórmula- es su principal alimento y fuente de nutrientes. Si se desean evitar las fórmulas convencionales, derivadas de leche de vaca, se "pueden utilizar aquellas con base de soja o de arroz hidrolizado", tal y como detalla Miriam Martínez Biarge, médica pediatra vegetariana-vegana.
Es a partir de los seis meses cuando tanto unos como otros empiezan a incorporar los alimentos sólidos, principalmente cereales integrales, frutas, verduras y hortalizas. En el caso de los bebés veganos es muy importante añadir legumbres, "el sustituto natural de la carne y el pescado en la alimentación vegetariana y vegana, por su alto contenido en proteínas, hierro y zinc". Se pueden ofrecer de muchas formas: en purés, como hummus de garbanzos, en forma de mantequilla de cacahuete, cocidas y mezcladas con arroz, pasta o quinoa, en forma de tofu o 'tempeh' en trocitos, como un yogur de soja...", enumera.
La legumbre más apropiada para comenzar es la lenteja roja pelada, que "tiene poca fibra y se digiere muy bien". Posteriormente aconseja introducir tofu, garbanzos cocidos, guisantes y lentejas sin pelar. "Siempre es mejor que se tomen cantidades pequeñas y acompañadas de verduras y hortalizas, ya que de esta forma sus nutrientes se absorben mejor y se facilita la digestión", advierte.
"A partir de los dos años, la alimentación de nuestros hijos debería parecerse cada vez más a la del resto de la familia" - Miriam Martínez, médica pediatra
También deben añadirse semillas y frutos secos, como nueces, pistachos y almendras, a partir de los 7 - 8 meses, pues "son ricos en proteínas, grasas, vitaminas y minerales", destaca. Es importante que estén bien molidos o en crema para evitar el riesgo de atragantamiento. No obstante, hay que tener en cuenta que a partir de los dos años, la alimentación de nuestros hijos debería "parecerse cada vez más a la del resto de la familia", indica.
El hecho de sustituir las proteínas de origen animal por las vegetales, que poseen un alto contenido en fibra, puede disminuir el riesgo de sufrir obesidad en la edad infantil, uno de los problemas que se encuentran cada vez más en las consultas. Además, en estos momentos en los que tanto se habla de reducir el consumo de carne de nuestra dieta para salvar el planeta, tal y como ha recomendado recientemente la OMS, la dieta vegana se erige como una opción cada vez más en alza entre la población.
Profundo desconocimiento
Las expertas consultadas afirman que es necesario incorporar nuevas opciones nutricionales y actualizar las directrices pediátricas con respecto a este tema, pues según los estudios científicos, la dieta vegana controlada es saludable. De hecho, así lo ratifica la Academia Americana de Nutrición, que asegura que una dieta vegana bien planificada es adecuada en todas las etapas de la vida, incluyendo bebés.
Las proteínas de origen vegetal son muy saludables.Shutterstock
Es responsabilidad de todos los padres informarse sobre la forma apropiada de alimentar a sus hijos, sea cual sea su dieta. "Es perfectamente posible criar un bebé con una alimentación vegana, no sólo sin correr ningún riesgo, sino además proporcionándole los beneficios de una alimentación vegetal. Si eres padre o madre vegano, busca información actualizada sobre alimentación infantil vegana o pide asesoramiento profesional", indican.
"Seguir una dieta vegana no quiere decir que sea saludable de por sí" - Ariane Soria, dietista-nutricionista de Nut&Health
Elección de los padres
En opinión de Martínez Biarge, desde que un bebé empieza su alimentación complementaria, la decisión de lo que va a comer corresponde a sus padres. "Todos los padres tienen el derecho de elegir la forma en la que van a educar a sus hijos y esto incluye su alimentación. Nuestra dieta no es sólo una cuestión cultural, gastronómica o nutricional, sino que responde a un modo concreto de ver la vida. En el caso de las familias veganas, la dieta no es más que una consecuencia del compromiso por evitar, en la medida de lo posible, todas las formas de explotación y crueldad hacia los animales; compromiso que se manifiesta en muchos más niveles además de la comida", concluye.
