"Voy con un hilo (personal, mil disculpas) sobre cómo mi decisión de no vacunar a mi hijo en contra de la varicela, nos afectó para siempre". Así comienza el relato de esta madre que cuenta cómo por no querer vacunar a sus hijos contra la varicela terminó en el hospital con su hijo de dos años y medio.

El problema de esta madre venezolana cuyo perfil en la red social Twitter es @PreguntaMama comenzó cuando ni ella ni su marido se asesoraron bien a la hora de vacunar a sus hijos. Ella misma reconoce no haber pensado demasiado en la consecuencia de no vacunar a los niños pues, "siempre vimos a la varicela como algo que nos dio en nuestra infancia y pues, ¡aquí estamos vivos y saludables!"

Ahí comenzaron los problemas para estos padres, pero sobre todo para sus pequeños. El asesoramiento parece no ser el adecuado ya que la madre admite haber consultado a su pediatra si vacunar o no a sus hijos. "Consultamos con nuestro pediatra y nos confirmó que era una decisión personal. Que de cualquier forma no había mucho riesgo", explica la progenitora para continuar relatando lo que les sucedió a sus hijos, "así que llegó el grandioso día en el que a mis pequeños les afectó la varicela. Nos repetían los demás era que mientras más pequeños, menos molesta la enfermedad, así que, aunque la enfermedad comenzó en la mayor, aspirábamos a que el peque también la cogiera, 'para salir de eso'".

Así fue como el bebe de dos años y medio fue atacado por la varicela y a diferencia de su hermana mayor, el pequeño se veía mucho más afectado. " Tenía granitos por todos, todos lados. Mucho malestar y llanto constante. Una vez pasó lo peor, nos sentimos aliviados, fueron días terribles. Poco sabíamos que lo peor estaba por llegar", explica la madre y no le falta razón puesto que dos semanas después el pequeño comenzó de nuevo a llorar y querer estar siempre en el pecho. " Cuando le miro mientras lo amamanto, noto que no puede sostener el pecho bien en su boca. Le miro bien y noto que tiene la mitad de la cara caída", relata la madre quien decidió llevar al pequeño al hospital para tratar a su pequeño.

" Al llegar al servicio de Neuropediatría mi hijo fue diagnosticado con el Sindrome de Ramsay Hunt" un mal originado por el virus de la varicela que afecta a el nervio facial que conecta con el oído, origina parálisis facial, tinnitus, y puede ocasionar sordera y lesiones oculares. El pequeño fue diagnosticado, " necesitó medicamentos del tipo aciclovir, terapia muscular, terapia de lenguaje y mucha teta y mimos para superar este desafío. Pasó por momentos de mucho dolor, le costó muchísimo hablar bien (todavía tiene problemas para ello), tiene sordera leve...", cuenta la madre quien ahora se da cuenta de que todo se podía haber evitado. El pequeño también sufre de vértigo, de mareos al realizar actividades sencillas, incluso cuando juega en el parque, va de paseo en el coche o cuando camina largas distancias. Tiene un ojito caído porque fue imposible recuperar la movilidad total del párpado.

El hilo publicado en Twitter ha recogido cientos de comentarios y gracias a los médicos y al tratamiento pueden contar lo sucedido. " Hoy estamos celebrando su cumpleaños número 6. Damos gracias a Dios de tener un hijo perseverante y luchador. Nos arrepentirnos siempre de nuestra decisión de no vacunarle en contra de la varicela y siempre que podamos, lo contaremos a otros padres. Ustedes, cuéntenlo también", finaliza la madre su relato de la experiencia que ha dejado secuelas a su hijo pequeño.