España es el país número uno de Europa en diagnóstico en fase avanzada, un hecho que se pretende reducir a marchas forzadas. La ciudad de San Francisco (EE.UU.) tiene un lema que hace referencia a la lucha contra el SIDA y es “Llevándolo a cero”. Bajo este paradigma, en el que cada vez menos personas son contagiadas por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), lo que se pretende es que no haya un caso más de contagio. Una iniciativa a la que quiere sumarse nuestro país.

A día de hoy en España hay 140.000 infectados por VIH, el 20% de los afectados desconoce que padece la enfermedad, lo cual es un problema por el riesgo de infección y transmisión que conlleva esta patología. Al año se diagnostican alrededor de 4.000 nuevos casos, de los que casi la mitad (46%) se detecta en fases avanzadas de la enfermedad.

Con esta premisa, Gilead se ha encargado de impulsar la V edición del HIBIC (Hitos en Investigación Básica y Clínica en VIH/Sida) reuniendo a más de 450 expertos nacionales e internacionales en esta materia para abordar los hitos más relevantes de 2018 en cuanto a investigación básica, epidemiología y clínica del VIH.

El doctor José Alcamí, uno de los coordinadores de esta edición del HIBIC manifestó que, en cuanto a la investigación, “los desafíos que tenemos pendientes en el área de ciencia básica son la curación de la infección de manera definitiva y el desarrollo de una vacuna preventiva eficaz”.

El que casi la mitad de los diagnósticos sea en fases avanzadas de la enfermedad es una de las cosas que más preocupa a los expertos, por ello, el doctor Santiago Moreno afirma: “Mientras se consigue la curación de la infección, los esfuerzos de control se están focalizando en la disminución del número de personas que se infectan. Por ello, identificar al mayor número de pacientes que tienen la enfermedad y ponerlos en tratamiento es un objetivo primordial”.

Respecto a la práctica clínica, coordinada por el doctor José Ramón Arribas, se expusieron tres proyectos que fueron publicados en 2018. En el primero de ellos, el doctor Jean-Michel Molina manifiesta que el efecto de la edad combinado con la inmunosenescencia (los efectos de la edad sobre el sistema inmune) hace necesario tratar a los pacientes de más de 50 años y con deterioro inmunológico lo antes posible porque son los que más se benefician de un tratamiento antirretroviral precoz.

El doctor Tae-Wook Chun es experto en la evaluación de las interrupciones del tratamiento viral como forma de saber si una estrategia curativa ha conseguido un efecto sobre el reservorio vital, ha expuesto que estas interrupciones cortas no parecen contribuir ni al aumento del tamaño del reservorio ni al deterioro del sistema inmune de los participantes en este tipo de estudios.

Por último, el Doctor Peter Hunt ha manifestado cómo niveles aumentados de parámetros inflamatorios predicen la aparición de los llamados eventos no-Sida, como los eventos cardiovasculares.

Esta edición cuenta con la novedad del ‘Meet the expert’, coordinado por el doctor Josep María Libre, con el objetivo de que jóvenes investigadores puedan compartir sus trabajos con los expertos internacionales.

En este contexto, y con todos los nuevos retos sobre la mesa, Gilead ha puesto su foco de atención en el VIH, siguiendo una línea de investigación para buscar la cura de la enfermedad. Amaya Echevarría, executive director de la unidad de negocio de VIH, afirma: “Estamos orgullosos de haber contribuido, a través de tratamientos innovadores, a transformar esta enfermedad mortal, en una patología crónica con una esperanza de vida similar a la de una persona sana”.

Líneas de investigación

En 2008, el paciente con VIH Timothy Brown se sometió a un trasplante de células madre para tratar una leucemia. El donante de médula tenía una mutación conocida en medicina como CCR5 Delta 32 que hace que sus células sean inmunes al VIH. Tras el trasplante, dejo de tomar la medicación y es considerada como la única persona en el mundo curada de sida.

Las esperanzas están puestas en la ciencia, que, igual que hace más de 30 años, cuando aparecieron las primeras personas con los síntomas del sida, los americanos y los franceses comenzaron una lucha a contrarreloj por descubrir la causa de la enfermedad hasta que dieron con el VIH. El escritor francés Dominique Lapierre narra los hitos de la investigación de Robert Gallo y Luc Montagnier hasta que consiguieron descubrir el origen.

En la década de los 80, las personas que contraían la enfermedad no conseguían sobrevivir. 30 años después, la gente puede vivir con la enfermedad. ¿Cuándo se encontrará la cura definitiva para erradicarla?