El "sillón-ball" tiene peligro, especialmente cuando se emiten por televisión nada menos que 64 partidos del Mundial de Rusia. Los españoles podríamos engordar hasta 5 kilos durante este torneo, ya que, según expertos de la web de médicos privados Topdoctors.es, durante los 90 minutos de un partido, los españoles llegamos a consumir entre 300 y 2.500 kilocalorías. Sin embargo, hay alternativas más recomendables a la hora de picar frente al televisor.

Millones de personas siguen alterando sus comidas y menús diarios para sentarse a comer o cenar mientras ven el Mundial de fútbol. A solas, con amigos, familiares o compañeros de trabajo, en casa o en el bar, pero siempre en torno a una pantalla y con un picoteo "fácil" entre manos. Los nervios y emociones que se experimentan durante el encuentro hacen que comamos de un modo descontrolado, improvisando, sin prestar atención a lo que ingerimos, cómo lo comemos y en qué cantidad.

Durante los 90 minutos que dura un partido de fútbol los espectadores pueden llegar a consumir hasta entre 300 y 2.500 kilocalorías. Algo que nos puede llevar a engordar entre 1 y 5 kilos de aquí a que termine el Mundial. Solo hay que echar un ojo a los alimentos estrella durante las celebraciones:

Cerveza: 150 kcal por 350 ml

Refrescos: 130kcal por 330 ml

Copas: 300 kcal

Patatas fritas: 30gr son unas 160 kcal

Aceitunas: 20 gr son unas 23 kcal

Frutos secos: 100gr son 500 kcal

Hamburguesa: en torno a 650 kcal

Pizza: unas 550 kcal

Rollito de primavera y arroz 3 delicias: hasta 700 kcal

Los especialistas avisan. "La comida rápida se caracteriza por su bajo aporte en fibra que provoca la ralentización del tránsito intestinal, la digestión pesada e incluso estreñimientos". Asegura la doctora Mar Fernández Nafría, nutricionista. "Además, la sal que suelen contener este tipo de alimentos potencia la retención de líquidos. Todo ello provoca que al día siguiente nos sintamos hinchados y más pesados e incluso que esa noche descansemos peor".

Comer alimentos con altas calorías de vez en cuando no resulta perjudicial. Sin embargo, la frecuencia de partidos durante el mundial es muy elevada. "El problema llega cuando se realizan comidas copiosas en torno a las 1.000 calorías cada una 2 o 3 veces por semana", continúa la doctora. "Es ahí donde se percibe el aumento de peso significativo". Por lo tanto, durante los 14 días que dura el mundial, los podríamos llegar a coger entre 1 y 5 kilos de peso.

Los pepinillos, los chips de verduras, o los crudités con salsa de yogur o hummus o los mejillones y berberechos? el picoteo estrella durante el Mundial 2018. Para poder disfrutar de un partido, es recomendable crear un ambiente relajado y alegre y evitar picotear más de la cuenta. Además, se puede diseñar un menú saludable tal y como aconseja la doctora y nutricionista Isabel Jimeno. Los alimentos que recomienda son:

  • Pepinillos: es recomendable sustituir las aceitunas por los pepinillos, que tienen un menor aporte calórico. 100 gramos de pepinillos en vinagre equivalen a 25 kcal, por lo que puede ser un buen aperitivo.
  • Chips de verduras: este plato es ideal porque simula a las patatas fritas, pero nada tienen en común. Al horno y sin una gota de aceite, las verduras laminadas se convierten en unos chips saciantes y ligeros para tomar durante los partidos de futbol.
  • Crudités con salsa de yogur o hummus: las crudités de verduras con salsa de yogur aportan una importante cantidad de vitaminas y muy pocas calorías.
  • Mejillones y berberechos al natural con jugo de limón: son un aperitivo perfecto tanto por su sabor exquisito, como por su bajo contenido en grasa, que además nos aportan proteínas y hierro así como vitaminas A y B.
  • Ensalada de tomate con queso de burgos aliñada con especias como orégano, comino y aceite de oliva virgen extra: las ensaladas siempre son un plato perfecto y la de tomate con queso de burgos es una combinación perfecta por ser baja en calorías. Además, el tomate contiene fibra y minerales como el potasio así como un gran aporte de vitaminas.

Los expertos aseguran que todos los platos tienen una versión saludable si los cocinamos nosotros mismos con un poco de ojo.