Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) han identificado una posible diana terapéutica para dos tipos de linfomas muy agresivos, concretamente el linfoma de Burkitt y el linfoma difuso de células grandes. El estudio, publicado en Blood, ha descubierto una molécula que regula la expresión de los linfocitos B, que bloquean el crecimiento de los linfomas de origen B. Esto abre la puerta a una nueva estrategia terapéutica para inhibir el crecimiento de los dos linfomas.