José Matteos es como su moda; inconformista, auténtico y transgresor. Este es el quinto año que presenta sus propuestas en el espacio Off de la Mercedes Benz Fashion Week. Siempre sorprende al público con los espacios que elige y con la puesta en escena y esta noche espera volver a emocionar y asombrar con su nueva colección en el Teatro Bodevil de Madrid, uno de los pocos desfiles programados fuera de las instalaciones de Ifema.
-¿La pasarela es el momento del espectáculo o hay que mostrar lo que en realidad está en las tiendas?
-Todos los estilismos que vamos a presentar en pasarela son los mismos que están a la venta 'on line' y en tiendas, aunque siempre queda espacio para un par de propuestas más espectaculares, en este caso serán dos que encajan a la perfección en el Teatro Bodevil, en plan cabaré.
-En esta colección se centra plenamente en trajes de fiesta y cóctel, ¿la calle no le inspira?
-Sí, es una colección de prendas de lujo con telas muy elaboradas, las más que he utilizado hasta ahora. Realmente es lo que me demandaban mis clientas y por eso me he centrado en ello. Mantengo algo de gótico, especialmente para Alemania y solo en la web.
-Siempre ha sorprendido con su creatividad. ¿En este tipo de prendas también es posible?
-Por supuesto. Juego con prendas que se sobreponen que ofrecenn la oportunidad de tener dos estilismos en uno. Piezas postizas incluidas en un vestido que se pueden quitar, posibilidad de combinar colores, vestidos con sobrefaldas... En la moda de fiesta para mujer se pueden hacer muchas cosas interesantes.
-¿Y en el hombre? En esta ocasión no presenta ninguna propuesta para ellos...
-La verdad es que la moda masculina es mucho más aburrida. Te das cuenta cuando ves una gala como la de los Goya: todos van iguales y si por un casual a uno se le ocurre llevar algo un poco más innovador le critican.
-Creó un concurso en Facebook para que la gente votara sobre los colores que creen que habría en esta colección.
-Es una manera de hacer participar a la gente en ella. De hecho, en la tienda 'on line' las clientas pueden crear las prendas a su medida; combinar los colores como más les guste, elegir largos distintos... Siempre he sido muy amante del negro pero, en esta ocasión, también habrá algo de color y texturas metalizadas muy interesantes que me ha costado mucho conseguir.
-Cada año es menor la representación gallega en la Mercedes Benz Fashion Week. ¿Qué le hace a usted ser fiel a ella?
-Creo que es una muy buena carta de presentación para entrar en el mercado internacional, sobre todo si hablamos de colecciones de lujo. Para mí es complicado ajustarme a sus fechas, pero hago el esfuerzo porque me merece la pena. El coste por desfilar no es elevado, por lo que no creo que los que se hayan separado de la pasarela lo hicieran por motivos económicos.
-¿No da un poco de vértigo dirigirse a un mercado de lujo?
-Hay más ricos que nunca, la cosa es llegar a ellos. De hecho, insisto en que me he especializado en el lujo por la demanda en tiendas, ya que los modelos que tenía no se podían lucir, por ejemplo, en una alfombra roja. También tengo bastante demanda de vestidos de novia y próximamente voy a presentar diez estilismos experimentales.
-Pensando en alfombras rojas y en lujo, supongo que la mujer en que piensa está fuera de España.
-Tengo clientas aquí, pero en un año seguramente me trasladaré a Los Ángeles, que es donde están la mayoría de las celebrities, aunque la producción la seguiremos manteniendo en Galicia, que es la que me asegura la calidad, las materias primas y la mano de obra cualificada que necesito. Ya estoy en contacto con varios showrooms para poder hacer las presentaciones... creo que es esencial estar allí y, además, me atrae el buen tiempo, que me sienta muy bien para mi salud.
