La diseñadora Sonia Peña se ha inspirado en los años 20, el charleston y el Cotton Club para su colección de moda nupcial que ha presentado en la pasarela Gaudí Novias.

Para cóctel ha presentado vestidos cortitos con flecos y tocados con plumas y brillantes, en tonos rosa y pasteles, y para la noche trajes vaporosos de gasa en rojo, verde y negro, con toques de luz y algunos volantes estratégicamente colocados.

Unas 10.000 personas han asistido a los dieciséis desfiles que se han celebrado en la pasarela de la Fira de Barcelona, una cifra que confirma que la crisis en el sector ha pasado un poco por encima, según Alex Flaqué, copresidente de Flaque Internacional, organizadora de la Barcelona Bridal Week.

Además, otras 1.500 personas asistirán esta noche al desfile de Pronovias, que este año es en solitario la fiesta más sonada del sector y la que más caras famosas y personalidades concentra.

Para Flaqué, la deslocalización, la calidad y una excelente relación calidad precio en la moda nupcial han sido el secreto que ha hecho que el sector de las novias sea muy potente y exportador y que Barcelona sea ahora un referente internacional en este campo, una ciudad en la que tienen su sede las industrias más importantes de novias del mundo.