El pasado fin de semana, Alba Carrillo sufría un aparatoso accidente en Telecinco. La modelo se enganchó, en maquillaje, con el clave de un secador y terminó por los suelos y con un radio roto. Aunque finalmente no tendrá que ser operada, está de baja y con un brazo inmóvil por lo que no puede hacer muchas de sus tareas diarias.

La colaborado cuenta con la ayuda de su madre para muchos de sus quehaceres. Uno de ellos han terminado con una surrealista historia en un veterinario cuando ambas acudieron juntas a vacunar de la rabia al perro de la modelo. Y todo terminó con Lucía Pariente con un dedo vendado.

El animal no se estaba quieto. Ella se puso a sujetarle y la aguja fue a parar a su dedo, provocando que una parte de la dosis haya entrado en su cuerpo. "Entre el pelo, el perro y la cabeza no sé qué ha pasado, pero al final me ha tocado a mí", explica entre risas en las historias que compartió la propia Alba en su cuenta de Instagram.

"Que conste que no me ha hecho efecto. Ha sido una dosis muy chica", asegura mientras su hija se lo tomaba con mucho: "¡Mundo! Estáis de suerte, la abuela tiene la vacuna de la rabia... lo que nos faltaba ya. ¿Nos puede pasar algo más?".