La princesa Mette-Marit de Noruega ha tenido una ingrata sorpresa nada más cumplir 49 años. El pasado sábado la esposa del príncipe Haakon sopló las velas en una fiesta familiar y justo después comenzó a mostrar los síntomas típicos de un resfriado. Con tal mala suerte que el test de coronavirus que se hizo salió positivo. Así lo comunicó palacio, tal como también informó de que la princesa enfermó también de coronavirus a finales de 2020. Aunque los síntomas son leves preocupan las consecuencias que pueda dejar el coronavirus en la salud de la princesa, debido a que se trata de una paciente de riesgo, a causa de la fibrosis pulmonar crónica que le fue diagnosticada en 2018, una enfermedad grave que puede acarrear insuficiencia respiratoria. “Durante varios años he tenido problemas de salud de manera regular; ahora sabemos más sobre los motivos. La enfermedad supondrá un cambio en la capacidad de trabajo», explicó entonces.