Dos años después de la muerte de Aless Lecquio, parece que Ana Obregón va recuperando poco a poco la ilusión. Después de mucho tiempo sumida en una gran pena que la tuvo alejada de muchos proyectos profesionales y algunas de sus grandes tradiciones, la bióloga está volviendo a sonreír.
Según ella misma ha confesado en más de una ocasión, sus amigos están jugando un papel muy importante en su recuperación. Los planes que organizan y la gran compañía que son para ella le están ayudando muchísimo.
La actriz ha pasado unos cuantos días en Ibiza para celebrar el cumpleaños de un gran amigo suyo y desde allí ha compartido varias imágenes y vídeos que demuestran que está volviendo a disfrutar de sus viajes a la isla y precisamente desde allí ha recuperado una de sus grandes tradiciones. Ana Obregón vuelve a dar la bienvenida al verano con su clásico posado después de dos años.
"Aquí os dejo mi primer y último bañito en Ibiza antes de irnos. En verdad solo me mojé los pies porque había algún paparazzi por ahí escondido", escribe la presentadora junto a dos fotografías que recuerdan mucho a sus tradicionales posados veraniego.
"Me voy tranquila pensando que hay alguien feliz de ver a su Mamá intentando vivir" terminaba diciendo haciendo mención, como siempre suele hacer, a su hijo Aless Lequio.
En esta ocasión ha dejado aparcado el bañador que lo ha sustituido por un elegante vestido de Zara de crochet en blanco y negro (los dos colores que siempre viste tras la muerte de su hijo).
