Hace pocos años que Eva García Sáenz de Urturi pisó por primera vez Santiago. Confiesa que entonces sufrió lo que se conoce como “síndrome de Stendhal” en el Obradoiro, llevada por la emoción. Pero ya desde antes tenía claro que “todo lo que tiene Galicia de leyenda, de inspiración” es, para los escritores, un territorio “muy fértil”. Por eso, y aunque reconoce que es un terreno que han transitado muchos a través de su pluma, no se resistió a incluir el Camino de Santiago en el libro que ha contribuido a que pueda presumir, como hace su editorial, de “dos millones de lectores”: “Aquitania”, un thriller histórico protagonizado por Leonor de Aquitania, que reinó en Francia e Inglaterra.
La obra que mereció el Premio Planeta 2020 arranca de la muerte del Duque de Aquitania frente al altar mayor de la catedral compostelana durante su peregrinación, que la autora vinculó al romance de Don Gaiferos. La escritora, que ya suma un centenar de ediciones de sus obras, entre ellas de la “Trilogía de la Ciudad Blanca”, con la que ha logrado entrar en el mercado estadounidense, contaba ayer en la capital gallega cómo por fin podía dar por cerrado un “ciclo” tras confirmar que en efecto el duque yace en el subsuelo de la catedral. “Me emociona mucho saber que el padre de Leonor está aquí, porque es como cerrar un ciclo. Empecé el viaje de documentación en Fontevraud, donde está enterrada Leonor, y hoy lo cierro con donde está enterrado su padre, que es donde comienza la novela”, explicó.
Éxito de ventas
Y si el periplo que ha convertido a “Aquitania” en la novela publicada en 2020 más vendida en España –como destacaba ayer Belén López, directora de la editorial Planeta– arranca en Santiago, no será esta la última vez que la escritora regrese a la tierra del Apóstol. En su encuentro con la prensa, uno de sus primeros contactos en directo con medios o público tras un año marcado por la pandemia, confesó que está unida al Camino por una “promesa inconclusa” que espera materializar algún día.
Pese a que 2020 va asociado a una “realidad distópica y oscura”, comentó Sáenz de Urturi, en su recuerdo queda vinculado también a un año “planetario” –por el galardón que recibió, el “más alto al que puedes aspirar si escribes en castellano”, dijo– y “único” en el ámbito “profesional”. Pese a a pandemia, sus libros, como indicó su agente literaria, Antonia Kerrigan, están viajando y su autora se “emociona” al verlos presentes en librerías de Polonia, Brasil o Cincinnati. “Es una de esas magias que consigue la literatura”, aseguró. En ese contexto, no es de extrañar que proclame que está “donde quiere estar”.
