La cantante Rihanna rechazó actuar en la Super Bowl, la final de la liga profesional de fútbol americano (NFL), debido a la polémica de la organización con la comunidad afroamericana, según revela en una entrevista adelantada ayer en la revista "Vogue". Preguntada por el asunto, la barbadiense afirma: "No podía atreverme a hacer eso. ¿Para qué? ¿Quién gana con eso? No mi gente. Simplemente no podía ser una vendida. (...) Hay cosas con las que no estoy de acuerdo para nada en esa organización, y no iba a acudir y servirles de ninguna manera". La polémica surgió cuando el jugador Colin Kaepernick, de los 49ers, se mantuvo arrodillado en 2016 mientras sonaba el himno nacional de EE UU en protesta por la injusticia racial y la brutalidad policial, lo que generó división en el país. Después de eso, no volvió a ser contratado.