Telecinco deberá cesar la emisión del concurso "Pasapalabra" después de que el Tribunal Supremo haya confirmado la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid y haya rechazado su recurso en relación al litigio que mantenía con la productora británica ITV por los derechos de emisión.

El Tribunal Supremo, según la sentencia notificada ayer, ratifica así el fallo del Juzgado de lo Mercantil de febrero de 2014 que condenaba a Mediaset, titular del canal Telecinco, a "cesar inmediatamente, quedando además prohibida de reanudar en el futuro, la emisión, edición, producción, reproducción, comunicación pública, distribución, transformación y toda y cualquier otra forma de explotación, por sí o a través de terceros, del programa Pasapalabra". También prohibía la emisión de "cualquier otro programa de televisión que tenga un formato idéntico o similar al del programa Pasapalabra" o que contenga esa denominación.

Mediaset demandó en diciembre de 2010 a ITV y pidió que se anulara el acuerdo suscrito entre ambas compañías, por el que la segunda concedió una licencia a la segunda de los derechos de producción y emisión en España de Pasapalabra, al considerar que la británica no era titular de los derechos de formato necesarios para la producción y emisión del programa ni de los derechos sobre su título. Por su parte, ITV alegó que Mediaset había incumplido esos acuerdos y que su emisión en Telecinco durante varios años había infringido los derechos de propiedad intelectual que la británica tenía sobre el formato y el título de ese programa, por lo que ejercitó acciones de cesación, prohibición e indemnización.

El juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid declaró que Mediaset había incumplido los acuerdos suscritos con ITV y que el uso por Mediaset del formato y del título del programa constituía una vulneración de los derechos que ITV ostentaba.

El Supremo le da la razón, aunque Mediaset señaló que seguirá emitiéndolo hasta que reciban la nueva sentencia. El programa de ayer fue emitido con normalidad.

Casi 20 años de historia

Corría el año 2000 cuando el programa empezó su andadura, por aquel entonces en Antena 3, y la gallega Silvia Jato era la encargada de presentar el programa que rápidamente se convirtió en un éxito de audiencias.

Aunque en 2006 la presentadora lucense fue sustituida por Jaime Cantizano, que no mantuvo las mismas cuotas y el programa llegó a su fin y fue "¿Quién quiere ser millonario?", también concurso, el que tomó el relevo de las tardes de la cadena.

Tan solo un año más tarde, Telecinco se hizo con los derechos del programa en España y Christian Gálvez tomó el timón de un barco que ha capitaneado durante 3.291 programas hasta ahora y a la cabeza de las audiencias en su franja horaria casi a diario.